Dia Nacional para la prevención del Suicidio
Psicología
El suicidio es un fenómeno multicausal en el que intervienen diversos factores que van desde lo político, económico y sociocultural hasta lo biológico y psicológico. Es así que el suicidio impacta enormemente en el plano individual, familiar y social, a través de varias generaciones. Por este motivo su abordaje debe ser implicando a todos los sectores de la comunidad (MSP, 2021).
La situación de Uruguay en este tema:
Según los datos del Ministerio de Salud Pública (MSP), en 2022 se suicidaron 818 personas, es decir, 60 personas más que en 2021.
La mayoría de quienes se suicidaron en 2022 son hombres, llegando a 639, mientras que 179 fueron mujeres.
Por cada suicidio es posible encontrar varios intentos previos, siendo el factor predisponente más importante. A su vez, es posible identificar otros factores de riesgo como son:
- Antecedentes personales o familiares de conducta suicida o trastornos psiquiátricos, destacándose la depresión.
- Determinados síntomas como ser: impulsividad, desesperanza, ansiedad/pánico, incapacidad de sentir placer (anhedonia), insomnio, alucinaciones.
- Situaciones desencadenantes estresantes o desesperanzadoras.
- Enfermedad física, cronicidad, dolor o discapacidad.
- Cambios en el tratamiento psiquiátrico.
- Factores sociales y ambientales (situación laboral, estrés, problemas familiares…etc.).
- Historia de abuso físico o sexual.
- Aislamiento social.
- Acceso a armas u otros métodos potencialmente letales (MSP, 2022; Pedro Martín-Barrajón Morán).
En ningún caso, debe minimizarse el riesgo, restarle importancia o tratar el tema como una “llamada de atención”. Cuando alguien habla de suicidarse, no está llamando la atención, está pidiendo ayuda, para una situación que no sabe cómo gestionar.
Mitos y preconceptos que podemos tener:
- Ignorar o minimizar las señales: “El que se quiere matar no lo dice” y “El que lo dice no lo hace”, “Sólo está tratando de llamar la atención”
- Reprender o reprochar: “cómo puedes pensar así”, “a mí no se me ocurriría hacer lo que estás haciendo”, “hay que estar loco para querer matarse”, “el suicidio es de cobardes”,
- “Como el suicidio es un acto del impulso, es imposible prevenirlo”
- Ignorar o minimizar las señales: “Si lo intentó y se salvó, ya está fuera de peligro”
- “Los niños JAMÁS se suicidan”
- “No hay que hablar sobre suicidio y menos aún hablar con la persona sobre sus ideas porque lo incita a concretarlas”
- Retar, cuestionar, desafiar, provocar: “Si quisieras matarte de verdad ya lo habrías hecho”.
Algunas señales menos evidentes son:
– Cambios horarios en sus hábitos y forma de vida. Pérdida/aumento de sueño.
– Despreocupación por la higiene o imagen personal.
– Aislamiento social y familiar. Anhedonia y/o desinterés generalizado
– Falta de concentración. Desinterés en estudios/trabajo.
– Consumo repentino de tóxicos/alcohol o aumento de la frecuencia o cantidad habitual.
– Acciones temerarias, riesgos innecesarios. Infracción leyes.
– Discusiones y peleas. Gasto de dinero injustificado o desproporcionado.
– Autocrítica, autohumillación. Agravamiento de síntomas en patología de base.
– Interés en temas relacionados con la muerte o películas relacionadas con el suicidio.
– Planes suicidas y acumulación medios: fármacos/armas/cuerdas.
– Sospecha de autolesiones leves (cortes).
¿Qué entendemos por conductas de Cierre?
Son conductas o acciones que la persona puede hacer antes de suicidarse para despedirse, cerrar sus asuntos, o “hacer las paces” con los demás, por ejemplo:
– Regalo de pertenencias, objetos apreciados o valiosos.
– Cesión de mascotas.
– Visitas inesperadas a familiares o personas cercanas, que hacía mucho tiempo que no se visitaban.
– Despedidas muy cariñosas o efusivas cuando no se comportaba así habitualmente.
– Redacción testamento/notas de despedida.
– Arreglar cuestiones del seguro.
– Puesta en orden de gestiones.
– Eliminar perfiles de redes sociales, salir de grupos whatsapp, algunos comentarios en determinadas redes sociales.
Guía para el acompañamiento:
Las conductas que se asocian a estos comportamientos asustan y confunden cuando las enfrentamos por primera vez.
Es importante saber que, más allá de las emociones de inestabilidad o de escasa comprensión que puedan generar, existen estrategias que podemos incorporar al generar un vínculo con este tipo de personas.
Es importante intentar ejercitar estas conductas a la hora de acompañar a alguien en esta situación:
- Escuchar sin juzgar
- Ayudar con tareas diarias, facilitar la rutina
- Ser paciente y reconocer los límites propios
- Reconocer los pequeños logros
- Identificar lo placentero y reforzarlo
- Detectar las creencias poco saludables
El estigma que se crea en torno a los trastornos mentales y el suicidio repercute negativamente en la búsqueda de ayuda a muchas personas que piensan en quitarse la vida o tratan de hacerlo y que, por lo tanto, no reciben la ayuda que necesitan. De ahí la importancia de aumentar la sensibilidad en la sociedad y superar los tabúes para avanzar en lo que respecta a la prevención del suicidio.
Algunas cuestiones a tener en cuenta:
Es importante tener en cuenta que las personas con ideación suicida tienen una visión pesimista de ellos mismos, su entorno y su futuro, así como también un estilo depresivo.
Esta manera de pensar y de sentir es la que los lleva a reducir la posibilidad de soluciones, conduciendo a un estado de desesperanza.
El origen de la ideación de la conducta surge a partir de un estresor que genera emociones de frustración o rechazo, deseo de escapar de esa situación y no contar con los recursos necesarios para solucionar ese problema.
Esas ideas en conjunto con los medios para lograrlo y el sentimiento de encontrarse indefensos favorecen la conducta suicida.
Será importante durante el acompañamiento, que el equipo de profesionales detecte aquellos apoyos sociales reales y percibidos.
Esta información puede ser valiosa para comprender su contexto y complementar oportunamente el intercambio con equipo de salud asistencial.
¿Dónde recurrir ante estas situaciones?
Las personas tienen el derecho de recibir atención integral en salud mental por parte de su prestador de salud. Asimismo, existen distintas líneas de apoyo telefónico a las cuales recurrir las 24 horas los 365 días del año:
Prevención de suicidio | *0767 / 0800 0767
Apoyo emocional ASSE | *1920 / 0800 1920
Línea drogas | *1020 / 08001020 / 2309 1020
Línea de orientación y derivación de mujeres en situación de violencia doméstica | *4141 / 0800 4141
Desde Pulso estamos implementando distintas estrategias en prevención y promoción en salud, así como seguimiento psicológico a socios y familiares que lo necesiten. Por lo que si te interesa profundizar en esta temática te invitamos a leer nuestro artículo disponible en nuestro blog y en nuestras redes sociales.
Nuestro equipo de respaldo y apoyo psicológico está disponible por vía telefónica ante orientaciones específicas que puedan necesitar. Todos los socios pueden llamarnos al 26040404, pedir ser contactado por un profesional y desde el equipo nos contactaremos a la brevedad.
Equipo de Respaldo Psicológico
Fiorella Torres
Verónica Varela
Verónica García
Camila Freire